Seguro has escuchado sobre los tratamientos de ácido hialurónico y bótox para lucir una piel más joven y tersa por más tiempo, pero, ¿conoces las diferencias entre ambos?
En este blog te explicamos sus principales diferencias e indicaciones para que tomes la mejor decisión al momento de decidir comenzar con uno de estos tratamientos de belleza.
Antes de empezar, ¿qué es el bótox y el ácido hialurónico?
Primero que todo, es muy importante conocer en qué consiste cada tratamiento para luego profundizar en sus diferencias. Si bien ambos son utilizados para cumplir con el mismo objetivo, revitalizar el aspecto de la piel, lo cierto es que existen diferencias importantes entre ambos.
Los neuromoduladores como la toxina botulínica o bótox, se compone de una proteína producida por la bacteria conocida como Clostridium botulinum, la cual tiene el efecto de relajar o paralizar los músculos con el propósito de limitar su movimiento continuo. De esta forma, evita la aparición de las arrugas dinámicas de expresión, creando un efecto lifting. Sus resultados pueden durar entre 4 a 6 meses.
Además de utilizarse para atenuar arrugas, la toxina botulínica también es empleada para combatir la sudoración excesiva, migrañas, estrabismo, entre otros.
Por su parte, el ácido hialurónico es una molécula que se encuentra de forma natural en nuestro organismo, y tiene la capacidad de atraer y retener 1.000 veces su propio peso en agua, por tanto, permite recuperar los niveles de hidratación que se pierde con los años. Este tratamiento otorga volumen, hidratación, elasticidad y sus efectos son más prolongados en el tiempo.
Principales diferencias y similitudes entre ácido hialurónico y bótox
Principales diferencias:
- Usos: El bótox paraliza la musculatura para evitar la aparición de arrugas por movimiento, mientras que el ácido hialurónico rellena las arrugas o surcos.
- Duración de los efectos: El efecto del ácido hialurónico puede durar hasta los 18 meses, y en el caso del bótox, entre 4 a 6 meses.
- Zonas de aplicación: El botox suele emplearse en el tercio superior del rostro, mientras que el ácido hialurónico puede aplicarse en cualquier área, con más frecuencia en el tercio medio e inferior.
- Volumen: El bótox no aporta volumen, sino que se inyecta en el músculo facial para disminuir su contracción; por su parte, el ácido hialurónico se inyecta directamente sobre la arruga que se desea rellenar y dar volumen.
Similitudes:
- Ambos son tratamientos inyectables.
- La aplicación en ambos es rápida, no más de 20 minutos.
- Tanto en el tratamiento de ácido hialurónico como en el bótox, los resultados son reversibles, es decir, que no son permanentes y necesitan de varias sesiones.